martes, 18 de agosto de 2009

LA HUERTA







¿Cómo hacer una Huerta Orgánica?







La Huerta Orgánica es una forma natural y económica de producir hortalizas sanas durante todo el año. Esto permite aumentar la cantidad y calidad de la alimentación, y puede ser también una alternativa para generar ingresos.
LIC. ALEJANDRA DELFANTE

La Huerta Orgánica es una forma natural y económica de producir hortalizas sanas durante todo el año. No se utilizan fertilizantes químicos ni insecticidas. Una familia de 4 ó 5 personas puede obtener verduras frescas para su consumo en 100 m2 de terreno. Asimismo, si no se dispone de un espacio de tierra, en muchos casos se utilizan macetas o latas grandes, toneles divididos por la mitad o canteros pequeños. Esto permite aumentar la cantidad y calidad de la alimentación, y puede ser también una alternativa para generar ingresos.

En el ámbito escolar, las huertas constituyen una opción para abastecer al comedor de la escuela, y también pueden ser útiles como recurso pedagógico en educación alimentaria y ambiental.

Al realizar una huerta debe considerarse:
Una buena exposición al sol.
Un cerco perimetral.
Una fuente de agua cercana.
Disponibilidad de semillas y de herramientas.

Una huerta orgánica implica “una correcta asociación de plantas, abonos orgánicos y una rotación adecuada”.

Asociar los cultivos significa sembrar o plantar juntas aquellas plantas que por uno u otro motivo se complementan beneficiándose entre sí.

Rotar significa alternar adecuadamente distintos cultivos en el tiempo.

Las rotaciones permiten evitar las plagas, conservar la fertilidad de la tierra y tener hortalizas durante todo el año.


Realización de la Huerta

Preparación de la tierra

Una vez elegido el lugar, es importante limpiar el terreno de yuyos, cascotes y vidrios. Luego se marcan los tablones o canteros, de 1,20m de ancho aproximadamente, con estacas e hilos.

Es conveniente dejar senderos de 30 ó 40cm de ancho entre los canteros para poder caminar.

Se hace una zanja de 30cm de ancho y 30cm de profundidad y la tierra que se saca se deja en la cabecera.

Se realizan cortes de aproximadamente 5cm de panes enteros de tierra, y sin modificar la posición que tenían, se colocan en la zanja anterior.

La última zanja se rellena con la tierra que se sacó de la primera.

Se desmenuzan los terrones grandes de tierra con la azada y aquellos que no se puedan se dejan al costado.

Por último se rastrilla para dejar la superficie pareja.

Con los tablones así preparados ya se puede sembrar.


La siembra

Se debe buscar en el calendario de siembras (siembras de primavera-verano y siembras de otoño-invierno), qué plantas pueden crecer en la temporada.

Es importante calcular cuánto se va a sembrar de cada especie.

Esto depende del lugar que se disponga, de la cantidad de agua disponible.

La propia experiencia irá indicando la cantidad más conveniente para sembrar.

La siembra puede ser directa o en almácigos.


Siembra Directa:

Unos días antes de sembrar, conviene remover la tierra y nivelarla con el rastrillo.

Cubrir con mantillo y dejar regado.

Al momento de la siembra se corre el mantillo, se marca el surco y se riega.

Luego se agrega abono compuesto y se siembra.

Se tapan las semillas con abono, se cubre con mantillo y se riega con lluvia fina.

Las semillas grandes, fáciles de manejar y fuertes para germinar se siembran directamente en el lugar donde crecerán. Es el caso del zapallo, zapallito, melón, maíz, poroto, acelga, espinaca y remolacha. Algunas semillas pequeñas como la zanahoria, perejil, escarola y lechuga también pueden sembrarse directamente.

Siembra en almácigos:

La mayoría de las semillas chicas son delicadas, deben tener cuidados especiales hasta colocarlas en el lugar definitivo, y por eso se siembran en almácigos. Es el caso del tomate, pimiento, cebolla, repollo, coliflor, apio, lechuga, puerro y berenjena.

Los almácigos pueden hacerse con cajones de madera, latas grandes o macetas. En el fondo se coloca una capa de paja que conservará la humedad, luego una capa de tierra, y en la superficie una capa de tierra fina mezclada con abono compuesto bien fino.

Para sembrar se marcan surcos paralelos a 10cm, se colocan las semillas con la mano, se cubre con la tierra preparada y se riega con lluvia fina. Se colocan en un lugar abrigado y con luz, protegiéndolos del frío y del calor excesivo.

Conviene que los riegos se hagan por la mañana temprano o por la tarde, cuando ya bajó el sol, evitando encharcar la tierra.Cuando las plantas tengan 3 ó 4 hojas o el tallo alcance el grosor de un lápiz ya están listas para ser trasplantadas al lugar definitivo de cultivo.

Cuidados de la huerta

Para obtener una producción adecuada son necesarios ciertos cuidados dentro de los cuales se encuentran: el riego, los abonos, las labores culturales (raleos, tutorados, desbrotes, protección con mantillo, carpidas) y el control de plagas.

Riego:

En verano debe regarse todos los días, a partir del momento de la siembra. Conviene realizarlo por la tarde, evitando el mediodía.

En invierno no hace falta regar tan seguido. Es conveniente hacerlo al mediodía, porque de lo contrario las heladas pueden dañar las plantas.

Las formas de riego variarán según de que cultivo se trate o eventualmente de la edad de los mismos.

Abonos:

El abono compuesto puede obtenerse en forma casera. Se utilizarán cáscaras de frutas, restos de verduras, yerba, té, café, huesos molidos, hojas.

Son varios los métodos para prepararlo. Lo ideal es apilar distintos materiales en capas, intercalando restos de vegetales verdes, restos de cocina, paja, estiércol, tierra y así sucesivamente. Se riega la pila para asegurar una buena cantidad de humedad y se la protege con algún material (plástico o chapa).

También puede hacerse en pozos o tachos.

En verano, el abono estará listo para ser usado al cabo de dos meses.

En invierno, demorará cinco o seis meses.


Fuente: "La huerta orgánica". Material de capacitación del programa Pro-huerta (INTA).
Cursos de Huerta Orgánica: -Puede consultarse en todas las oficinas del INTA del país.(Programa Pro-huerta). En Capital Federal: Chile 460, 1º piso. Tel. 43390600 int.5118 Email: prohuer@correo.inta.gov.ar-

Informes: procadis@correo.inta.gov.ar-Huerta "Sin barreras". Juncal 3251.

Curso de capacitación: "La huerta orgánica". Duración: mensual, días viernes de 14 a 16 h. GRATUITO. Informes e inscripción (con anticipación): huertasinbarreras@yahoo.com.ar-Facultad de Veterinaria (UBA) Chorroarín 240. Enseñan a realizar huertas familiares, cultivos verticales (en balcones y terrazas) y cultivos en espacios reducidos. Brindan materiales, textos y semillas. Informes: teléfono 45248412.-Facultad de Agronomía (UBA) San Martín 4453. Curso:"Horticultura orgánica para autoabastecimiento". Informes: teléfono 45248014 o pasantia@agro.uba.ar

INFORMACIÓN DE:


Huertas en macetas para principiantes

Con buen sol y buena tierra podemos consumir hortalizas recién cosechadas todo el año. Animate y contanos cómo te resultó

Las hortalizas necesitan pleno sol para crecer y desarrollarse bien, siendo el ideal el que reciben entre las 10 y las 16. Este factor es el más limitante. Lugares sombríos no son recomendables , ya que las plantas se debilitan, crecen menos y son más sensibles a las enfermedades. Además del sol, un buen sustrato nos asegurará el éxito de nuestra huerta. Éste consiste en mezclar un 50% de tierra fértil de buena calidad, 25% de abono compuesto o humus de lombriz y 25% de perlita o arena gruesa. Los contenedores más recomendables son los de fibrocemento, que son menos pesados que los de barro y los de cemento, y más resistentes. Sin embargo, no se descartan otros materiales: plástico, metal, fibra de vidrio, cerámica, barro y cemento. En macetas de 40cm de alto por 40cm de ancho podremos cultivar todo tipo de hortalizas , y dejaremos aquellas de menor tamaño para las verduras de bajo porte y desarrollo de raíces (ciboulette, perejil, lechuga, achicoria, rúcula). Con cinco o seis macetas obtendremos una buena cosecha en la época de cultivo.

Los cuidados

• Remover bien la tierra entre plantas con palita de mano e incorporar quincenalmente humus de lombriz o abono compuesto (4 cucharadas soperas por maceta).

• Hacer rotaciones, es decir, no repetir en la misma maceta la especie que acabamos de cosechar. De esta manera, cortamos el ciclo de las enfermedades y plagas.

• Desmalezar.

La cosecha

• Sembrando escalonadamente lograremos cosechar verduras durante todo el año y sin necesidad de guardarlas en la heladera.

• Se recomienda ir cortando las verduras de a poco. En el caso de las lechugas, cortar las hojas externas; en el caso de la acelga, radicheta y perejil se recomienda cortar con tijera a ras

• Un buen rendimiento va a depender de cómo cuidemos el suelo, la cantidad de sol que reciban las plantas y el corte que se haga de cada una.


Asociación y rotación

• Es ideal colocar distintas plantas en una maceta, para así aprovechar mejor la tierra y mezclar aromas para desorientar a los insectos plaga.

• Cuando terminemos un cultivo, colocar en su lugar plantas de distintas familia y forma. Por ejemplo, donde hubo lechuga, plantar zanahoria o rúcula. • Las flores amarillas o anaranjadas –como copetes, caléndulas o margaritas– intercaladas con las hortalizas atraen innumerables insectos benéficos





TAMBIÉN CONSULTÁ EN:

INTA -PROHUERTAS- PUBLICACIONES



No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMENTARIOS: